De acuerdo con la Asociación Mundial de Medicina del Sueño (WASM, por sus siglas en inglés),»los problemas de sueño constituyen una epidemia global que amenaza la salud y la calidad de vida de más del 45% de la población mundial».
Dormir bien es parte fundamental para gozar de una buena salud, además de una dieta equilibrada y ejercicio regular, aseguran los médicos.
Muchas personas dicen que sólo duermen entre cuatro y cinco horas al día, pero eso no es algo de lo que se debiera presumir, sino un motivo para poner atención a su salud en general.
La falta de sueño tiene impactos altamente nocivos en la salud, tanto física como mental.
Sabemos, por varias investigaciones, que si sufres privación de sueño tienes un riesgo mucho más alto de padecer enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes y depresión.
Estas son algunas de las formas en las que dormir poco puede afectar a tu salud.
Mala dieta
La falta de sueño hace que nos alimentemos peor afirmaron médicos a la BBC de Londres.
De acuerdo con un estudio desarrollado por la RSPH, más de un tercio de la gente come mal cuando duerme poco.
Cuando dormimos poco, nos alimentamos peor.
Regularmente al estar despierto demasiadas horas, hace que consumamos alimentos poco saludables y eso tiende al aumento de peso.
La comunidad científica también vincula la falta de sueño a la obesidad y a la diabetes.
Según un estudio realizado en 2015 por investigadores en Qatar, dormir poco hace que aumente nuestro apetito y la resistencia a la insulina.
Y, de acuerdo con la WASM, dormir bien es «esencial para la regulación metabólica, sobre todo en los niños, y existen evidencias entre las horas de sueño y la obesidad infantil».
En definitiva, tal y como aseguran los expertos en el tema «si duermes bien comerás mejor».
2. Salud mental afectada
Dormir poco está relacionado con una gran variedad de trastornos físicos, mentales y del comportamiento.
La salud mental es una cuestión particular y es, en cierto modo, un círculo vicioso: si tienes problemas mentales, duermes poco, y viceversa. Y te sientes cada vez peor.
Si duermes poco, es más probable que sufras trastornos mentales.
Los médicos consideran «vital» pedir ayuda psicológica en estos casos, y aconseja, en casos de insomnio, recurrir a tratamientos como medicamentos específicos o la terapia de conducta, que ha demostrado ser «altamente eficaz».
Según el Instituto de Medicina del Sueño, una organización española que investiga los trastornos del sueño, la falta de sueño está ligada a la depresión, la ansiedad y los problemas psicológicos.
3. Riesgo de accidentes
Si sufres falta de sueño, tienes más posibilidades de sufrir un accidente, ya sea en el trabajo, manejando o simplemente en casa haciendo tus labores cotidianas.
De acuerdo con la especialista, «uno de cada cinco accidentes de auto tiene que ver con la falta de sueño.
Uno de cada cinco accidentes de auto se produce por falta de sueño.
Según la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA, en inglés) de Estados Unidos, 40.000 personas sufren lesiones cada año debido a problemas relacionados con la falta de sueño, y 1.550 personas mueren en este tipo de accidentes en el país.
Y el Harvard Medical School encontró que 250.000 conductores se quedan dormidos cada día.
4. Menor rendimiento físico
Es importante dormir bien para tener energía durante el día, que nos permita desarrollar nuestra actividad diaria.
Se trata, de hecho, una cuestión esencial para el funcionamiento de nuestro día a día, dicen los expertos.
El sueño tiene gran impacto en el bienestar físico y mental porque es reconstituyente.
Muchos deportistas pueden dormir poco y rendir a un buen nivel, pero es fundamental descansar el tiempo suficiente después de practicar ejercicio.
El problema de la falta de sueño es que afecta directamente en el rendimiento físico ya que el cuerpo necesita un mínimo de horas de descanso.
Por la noche se produce el proceso de regeneración de tejidos, tanto cerebral como físicos. Si no se produce un descanso no hay una recuperación correcta y eso afecta directamente al rendimiento, tanto físico como intelectual.
Dormir tiene un verdadero impacto en nuestra salud porque es reconstituyente.
Además, practicar ejercicio físico hará que duermas mejor, por lo que ambas actividades se complementan a la perfección.
Limitada la capacidad cognitiva
La falta de sueño afecta a nuestra memoria y a nuestra capacidad de aprendizaje.
Los efectos de la falta de sueño afectan a la capacidad de atención, la recuperación de la memoria y el aprendizaje, aseguran investigadores
Dormir bien está subestimado por mucha gente, pero es un tema que debería preocuparnos a todos. Es una cuestión de salud pública.
Y es que dormir bien es, en realidad, un sueño para muchas personas.