El pollo es uno de los ingredientes más populares en la cocina por su versatilidad, precio accesible y alto valor nutricional. Sin embargo, es fácil caer en la monotonía si siempre lo preparamos de la misma forma. Aquí te compartimos ideas frescas y deliciosas para reinventar tus platillos con pollo.
1. Clásicos con un giro
- Pollo rostizado con especias: Marínalo con ajo, romero y miel antes de hornear.
- Pechugas rellenas: Espinacas, queso crema y champiñones le dan un toque gourmet.
- Enmoladas de pollo: Desmenúzalo y úsalo para enchiladas bañadas en mole.
2. Opciones ligeras y saludables
- Ensalada César con pollo a la parrilla: Crujiente, fresca y llena de proteína.
- Bowls estilo hawaiano (Poke Bowl): Arroz, pollo teriyaki, aguacate y mango.
- Sopa de pollo y limón: Una versión refrescante para días calurosos.
3. Recetas rápidas para días ocupados
- Tiras de pollo al ajillo: Salteadas en 10 minutos, ideales para tacos o pasta.
- Pollo al horno con papas: Un clásico «todo en una charola».
- Sandwich de pollo deshebrado: Mezclado con salsa BBQ y coleslaw.
4. Atrévete con sabores internacionales
- Curry amarillo tailandés: Con leche de coco y vegetales.
- Pollo tikka masala: La estrella de la cocina india.
- Pollo al estilo jerk jamaiquino: Marinado en especias picantes y asado.
Tips para que quede perfecto
- No sobrecocines: El pollo seco pierde sabor. Usa termómetro (75°C en el centro).
- Marinar es clave: Desde 30 minutos hasta toda la noche para mayor jugosidad.
- Aprovecha el caldo: Hierve los huesos para hacer sopas o arroces.
¿Sabías que…?
El pollo es rico en proteínas y bajo en grasa (si le quitas la piel). Además, ¡su sabor neutro lo hace compatible con casi cualquier ingrediente!
Bonus: Si quieres ahorrar, compra pollo entero y divídelo tú mismo. Las piernas y muslos son ideales para guisados, mientras que las pechugas funcionan para planear o empanizar.