Popularmente, se le conoce como panza «chelera» al aumento de grasa abdominal en personas que beben mucha cerveza de forma frecuente.
Pero, es por el consumo de cerveza? La respuesta es no; una cerveza de 356 ml contiene alrededor de 153 calorías, lo mismo que dos rebanadas de pan o una taza de arroz.
El divulgador científico Greg Foot explicó a la BBC lo que sucede: al beber una gran cantidad de alcohol, el hígado tiene trabajo adicional, por lo cual debe concentrarse en eliminar las toxinas y quemar el alcohol. Esto implica que deja pasar las que provienen de otros alimentos que se ingieren, como papas, alitas y demás botanas.
Cuando el hígado se libera para atender lo que pasa con esas botanas, sus grasas ya están instaladas en el cuerpo, en particular en abdomen y caderas.