Los gatos son conocidos por su naturaleza independiente, lo que a veces los lleva a ser poco amigables con otros animales, incluyendo sus propios compañeros felinos. Este comportamiento puede desembocar en peleas, y los especialistas de la organización veterinaria del Reino Unido People’s Dispensary for Sick Animals (PDSA) han explicado por qué ocurre y cómo prevenirlo.
¿Por qué pelean los gatos?
Los gatos domésticos utilizan el lenguaje corporal para comunicarse. Las señales como gruñidos o maullidos pueden ser indicativos de agresividad. Además, su instinto territorial juega un papel clave. Muchos gatos disfrutan de la soledad y pueden sentirse amenazados si perciben que otro felino invade su espacio, lo que los puede llevar a pelear.
Los gatos establecen áreas específicas que consideran seguras y propias. Si sienten que otro animal está invadiendo ese territorio, intentarán ahuyentarlo, inicialmente con señales sonoras que pueden escalar hasta la agresión física.
Algunas razones comunes de peleas entre gatos son:
- Protección del territorio: Los gatos tienden a delimitar un área específica en la que se sienten seguros. Si perciben una invasión, reaccionarán agresivamente.
- Tensión en hogares con varios gatos: En casas donde conviven varios felinos, puede haber conflictos por la competencia de recursos como comida, camas o cajas de arena.
- Estrés: Los gatos estresados pueden volverse más agresivos. Es común que se escondan o eviten ciertos lugares antes de empezar a pelear.
¿Cómo evitar que tus gatos peleen?
Los expertos de PDSA sugieren algunos métodos para prevenir peleas entre gatos:
- Mantén rutinas separadas: Intenta que los gatos no interactúen tanto entre sí, que coman en momentos diferentes y no compartan platos o cajas de arena.
- Esteriliza a tus mascotas: Los machos no castrados suelen ser más territoriales y agresivos.
- Crea un entorno controlado: Si tienes un jardín, asegúrate de que esté cercado para evitar que gatos externos invadan el espacio de tu felino.
- Introducción gradual de nuevos gatos: Si adoptas otro gato, hazlo poco a poco, permitiendo que se acostumbren al olor del otro antes de presentarlos cara a cara.
- Proporciona suficiente espacio y recursos: Asegúrate de que cada gato tenga su propio lugar, juguetes y rascadores para minimizar la competencia.
Mantener a los gatos mentalmente estimulados y con suficiente espacio puede reducir significativamente los conflictos entre ellos.
