El sexting se ha vuelto una practica común; fotografiarse o grabar un video erótico para enviarlo a la pareja o prospecto romántico.
La Gaceta Universitaria analiza que es lo que lleva a las personas a exponer de esa forma su intimidad.
Sexting proviene de las palabras en inglés “Sex” (sexo) y “Texting” (envió de mensajes por medio de dispositivos móviles).
Esta práctica ha cobrado popularidad por el intercambio de fotografías o videos en poses eróticas o de desnudos.Este concepto se usó por primera vez en 2005 y podemos decir que es la evolución natural del intercambio de mensajes sexuales, junto al desarrollo de las propias tecnologías, por ejemplo, la inclusión de la cámara de fotos en los smartphones o la conexión a Internet de estos terminales.
La cara amable
El sexting no tiene por qué ser ni malo ni peligroso, entre adultos y con el consentimiento de ambos, puede, como dijimos, llegar a ser una práctica sexual más, una forma de probar algo nuevo en la relación. O de atraer la atención de una persona con la que se ha entablado contacto a través de una aplicación o una red social.
Mientras seamos conscientes de lo que implica mandar una imagen o un vídeo de índole íntima o en una actitud sexual a otra persona y tomemos las precauciones correspondientes, el sexting puede ser una parte más de nuestra vida en el mundo digital.