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Causas y tratamientos para prevenir la alopecia

La caída del cabello es un proceso natural que forma parte del ciclo vital del cabello. Es normal perder hasta 150 cabellos al día, ya que los folículos pilosos atraviesan distintas fases, incluida la fase telógena, en la que el cabello se cae para dar paso a un nuevo crecimiento. Sin embargo, cuando la pérdida es excesiva o se acompaña de otros síntomas, puede ser señal de un problema que requiere atención médica.

Existen diversos tratamientos que pueden ayudar a combatir la caída del cabello, entre los más eficaces se encuentran:

  • Minoxidil: Un vasodilatador que estimula el crecimiento del cabello. Puede aplicarse de forma tópica o por vía oral.
  • Finasteride y Dutasterida: Inhibidores de la 5-alfa reductasa que previenen la caída del cabello, especialmente en casos de alopecia androgénica. Su uso en mujeres debe ser supervisado por un médico.
  • Plasma Rico en Plaquetas (PRP): Técnica en la que se inyectan factores de crecimiento obtenidos de la sangre del paciente para estimular la regeneración capilar.
  • Mesoterapia capilar: Consiste en aplicar principios activos directamente en el cuero cabelludo para nutrir y fortalecer los folículos pilosos.

Además de los tratamientos médicos, mantener una rutina saludable es esencial para la salud capilar:

  • Seguir una dieta equilibrada, rica en vitaminas y minerales.
  • Reducir el estrés y practicar técnicas de relajación.
  • No abusar de herramientas de calor ni de productos químicos agresivos.
  • Evitar el tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol.
  • Consultar a un dermatólogo ante cualquier cambio en la densidad o calidad del cabello.

Aunque champús y suplementos alimenticios pueden mejorar la apariencia del cabello, no son suficientes para prevenir o detener la alopecia. Es fundamental consultar a un dermatólogo especializado en tricología ante cualquier cambio en la salud capilar. Si notas que tu cabello se está debilitando, pierde densidad o presenta cambios inusuales, no esperes a que el problema avance. Un diagnóstico adecuado es clave para obtener el tratamiento más eficaz.