Es una escena común: entras a un baño público, buscas un cubículo libre y te encuentras con una puerta que deja un espacio libre en la parte inferior. ¿Te has preguntado alguna vez por qué las puertas de los baños públicos no son completas?
La respuesta no tiene que ver con la falta de presupuesto o con un diseño descuidado. En realidad, hay varias razones prácticas detrás de este diseño peculiar:
1. Ventilación y control de olores: Las puertas con espacios permiten la circulación del aire, lo que ayuda a disipar los olores desagradables que se generan en el interior de los cubículos. Un espacio cerrado herméticamente retendría estos olores, haciendo que la experiencia en el baño sea más incómoda.
2. Visibilidad y seguridad: El espacio inferior en la puerta permite ver si un cubículo está ocupado o no, sin la necesidad de abrir la puerta por completo. Esto facilita a los usuarios encontrar un cubículo disponible y reduce el tiempo de espera, especialmente en lugares concurridos. Además, permite a los cuidadores o personal de seguridad observar si alguien necesita ayuda en caso de una emergencia.
3. Higiene y limpieza: Las puertas incompletas facilitan la limpieza del suelo de los baños. Los limpiadores pueden pasar trapeadores o mangueras sin tener que preocuparse por esquivar las puertas. Esto ayuda a mantener una mejor higiene en el área.
4. Sensación de espacio y claustrofobia: Un cubículo completamente cerrado puede generar una sensación de claustrofobia en algunas personas. El espacio inferior en la puerta ayuda a crear una sensación de mayor amplitud y reduce la ansiedad que algunos usuarios pueden experimentar en espacios cerrados.
5. Costo y materiales: Las puertas incompletas requieren menos materiales y son más fáciles de instalar que las puertas que llegan hasta el suelo. Esto se traduce en un menor costo de construcción y mantenimiento para los baños públicos.
6. Disuasión de comportamientos indebidos: La falta de privacidad total en los cubículos puede disuadir a las personas de realizar actividades indebidas o peligrosas dentro de ellos. La visibilidad parcial permite a otros usuarios estar más alertas y reduce la posibilidad de que ocurran comportamientos inapropiados.
7. Acceso para personas con discapacidades: En algunos casos, el espacio inferior en la puerta puede facilitar el acceso a los cubículos para personas con discapacidades que utilizan sillas de ruedas o andadores.
Si bien las puertas incompletas en los baños públicos pueden parecer un detalle insignificante, en realidad responden a una serie de necesidades prácticas y de diseño que buscan mejorar la experiencia de los usuarios, la higiene y la seguridad en estos espacios públicos.
