La danesa Victoria Kjaer, bailarina profesional de 21 años, fue coronada la noche de este sábado como Miss Universo 2024, en una ceremonia histórica celebrada en la Ciudad de México. Este año, el certamen rompió esquemas al incluir por primera vez a mujeres que han sido madres, marcando una nueva etapa en la evolución del concurso de belleza más prestigioso del mundo.
Kjaer, quien superó a 130 competidoras, el mayor número en la historia del certamen, impresionó al jurado con su carisma, talento y propuesta enfocada en la promoción de la salud mental en la juventud. Como primera finalista quedó Chidimma Adetshina, estudiante de leyes de Nigeria, mientras que la mexicana Fernanda Beltrán alcanzó el tercer lugar, convirtiéndose en la segunda finalista. La tailandesa Suchata Chuangsri y la venezolana Ileana Márquez completaron el cuadro de honor.
Desde 2022, cuando el concurso fue adquirido por la firma tailandesa JKN Global Group, encabezada por la empresaria transgénero Anne Jakapong Jakrajutatip, el certamen ha buscado renovarse para ser más inclusivo. La edición 2023 ya había incorporado participantes casadas, mujeres de talla grande y concursantes transgénero, pero este año destacó la participación de diez mujeres que han sido madres.
Entre ellas, Beatrice Njoya, de Malta, madre de tres hijos y la participante de mayor edad con 40 años, y Jennifer Colón, una esteticista puertorriqueña de 36 años y madre de tres, se ganaron el respeto del público. También destacó Logina Salah, una modelo egipcia de 34 años con vitiligo y madre soltera de una niña, quien llegó a las semifinales.
Kjaer, quien lleva ahora una corona valuada en más de 5.3 millones de dólares, también recibió un premio en efectivo de 250 mil dólares y un salario mensual de 50 mil dólares durante su reinado como embajadora global de la organización. Su misión durante el próximo año incluirá el impulso de causas sociales y proyectos enfocados en el empoderamiento femenino y la inclusión.
El evento también fue un escaparate para las historias personales y el impacto social de las participantes, en particular la venezolana Ileana Márquez, una educadora y presentadora de televisión con una niña pequeña, quien se ganó el corazón del público con su elocuencia y compromiso con la educación.
México fue anfitrión de Miss Universo por quinta ocasión, reafirmando su conexión histórica con el certamen, que este año cumplió 73 ediciones. La Ciudad de México vibró con la gala que, además de la coronación, incluyó una reflexión sobre la evolución del concurso y su intento por romper con las críticas que durante décadas lo señalaron como un promotor de estereotipos de género.
La victoria de Kjaer no solo marca un logro para Dinamarca, sino también para la nueva etapa de Miss Universo, que busca representar a mujeres diversas, reales y empoderadas. La edición 2024 pasará a la historia como un paso más hacia la inclusión en los concursos de belleza.