Ante el alto costo de productos químicos y servicios de exterminio, cada vez más personas recurren a soluciones caseras para combatir la presencia de cucarachas en el hogar. Una de las alternativas más difundidas es la trampa con vaselina, recomendada especialmente para la cocina, uno de los espacios donde estos insectos suelen aparecer con mayor frecuencia. Este método destaca por ser económico y de fácil elaboración. En redes sociales se han popularizado diversas versiones. Sin embargo, autoridades sanitarias han precisado la forma más eficaz de aplicarla, el objetivo es reducir la presencia de estos insectos sin recurrir de inmediato a químicos.
De acuerdo con el Departamento de Salud de Ottawa, Canadá, la trampa más efectiva se elabora con un frasco de vidrio alto, papel negro o pintura del mismo color, vaselina y un cebo alimenticio como fruta, pan o jamón. El primer paso consiste en cubrir el fondo del frasco con papel negro o pintarlo. Posteriormente, se debe aplicar vaselina por dentro y por fuera del cuello y la boca del recipiente. El frasco se coloca cerca de los sitios donde se detecte actividad de cucarachas. La vaselina impide que los insectos puedan salir una vez que entran.
Algunas variaciones del método sugieren colocar alimento dentro del frasco para atraer a las cucarachas. Al intentar salir, resbalan por la vaselina y quedan atrapadas. Por la mañana, se recomienda eliminarlas utilizando agua caliente con jabón y desecharlas en la basura. No obstante, el canal especializado “Insectos e invasores” advierte que estas trampas no atacan la causa raíz de una infestación. Las cucarachas se reproducen rápidamente y pueden existir nidos ocultos. Capturar solo algunos ejemplares no siempre resuelve el problema.
Aunque la trampa con vaselina es una opción funcional y accesible, no garantiza resultados totales si la plaga persiste. En esos casos, se recomienda recurrir a métodos tradicionales o servicios especializados. Como apoyo, también existen repelentes naturales como clavos de olor, mezclas de bicarbonato con azúcar y aceites esenciales de menta o lavanda. Las cucarachas buscan alimento, humedad y calor, condiciones comunes en la cocina. Mantener la limpieza y colocar trampas en esta zona puede ayudar a disminuir su presencia.




