Último minutoVida y Entretenimiento

Tú y yo juntos, la historia del hilo rojo

La historia del hilo rojo tuvo sentido cuando te encontré, cuando me enamoré, cuando te viví, y más, cuando me alejé.

Comprendí que nuestras almas siempre estarían unidas y entrelazadas, sin importar, el tiempo, la distancia o las circunstancias.

Por que cuando te encuentro en mis sueños, como por arte de magia un mensaje o una llamada tuya aparece en mi celular al día siguiente.

Por que cuando más te pienso es cuando nos volvemos a contactar, porque cuando tengo un mal presentimiento es porque algo pasa y roba tu paz.

Nuestros caminos se tuvieron que separar, miles de kilómetros nos separan, otros corazones ahora nos acompañan, pero de algún modo, estamos conectados.

Sin importar el tiempo o el espacio entre tú y yo, ese hilo que para todos es invisible, está ahí, uniéndonos por la eternidad.

Porque aunque otros sean los que nos tomen la mano, entre usted y yo hay un amor enorme, sobrenatural, no se acaba, se mantiene y crece al pasar los años.

Me resulta increíble, casi mágico y muy difícil de explicar que entre vos y yo, existe un lazo fuerte e invisible, yo estaré siempre para usted, a una llamada de distancia, siempre dispuesta a escuchar, apoyar y al pendiente.

Y aunque hoy duerma en otros brazos usted fue, usted es y usted seguirá siendo mi poema favorito, el amor de está y de todas mis vidas.

Comprendí que aunque mi alma éste unida a la suya, en el mundo actual tú y yo jamás podremos ser, que aunque sienta que mi corazón esta en mil pedazos tendría que dejarlo ir, y ahí aprendí y madure.

Tú serás más feliz besando otros labios, está en diferente momento, sus intereses y planes no armonizan con los míos, de eso se trata dejar ir, aceptar que el amor no se acaba y el olvido no va a llegar.

No hubo fracaso el objetivo siempre fue verlo feliz, conmigo o sin mí, y eso no disminuye mi interés, mi cariño hacia usted, por el contrario.

Es la muestra más grande de que mi amor es mayor que las circunstancias de esta historia, y que estoy dispuesta a aguardar, que quizá en otra vida, sí logremos juntos caminar.

Te amo amor, te amo mi vida, te amo con todo mi corazón, mi alma y mi fe.
Para usted yo siempre estaré con el corazón abierto, con mi amor intacto, aguardando el próximo encuentro, esperando volver a caminar otra vez tomados de la mano.

La distancia, es relativa, entre usted y yo no existe, usted tiene mi corazón y yo tengo el suyo y lo cuido como mi mayor tesoro, sin interrumpir tu presente, mi amor ausente.

Siempre estaremos el uno para el otro, amándonos, cuidándonos, a distancia,
ven esta noche a visitarme, amo en mis sueños encontrarte, sin daños a terceros.

Mi amor te amo, escúchalo aunque no lo pronuncié, te espero en el sueño de siempre,
no llegues tarde.

Botón volver arriba