Con el aumento de las temperaturas, es crucial recordar las medidas preventivas para evitar un golpe de calor, un fenómeno potencialmente fatal que puede dañar el cerebro y otros órganos vitales. La Comisión Nacional del Agua (Conagua) recomienda hidratarse adecuadamente y evitar la exposición prolongada al sol, pero ¿qué hacer si alguien experimenta un golpe de calor?
Cuando la temperatura corporal aumenta rápidamente y no puede ser normalizada, se produce un golpe de calor, lo que requiere atención médica urgente. Es fundamental tener a mano los números de emergencia y actuar rápidamente en caso de necesidad.
¿Cómo puedes ayudar mientras llega la ayuda?
- Sacar a la persona del ambiente de calor.
- Quitar el exceso de ropa.
- Bajar la temperatura del paciente.
- Hidratar con agua fría.
Es importante utilizar cualquier recurso disponible para reducir la temperatura del afectado:
- Bañar con agua fría.
- Rociar con una manguera de jardín.
- Pasar una esponja con agua fría.
- Abanicar mientras se rocía agua fría.
- Colocar compresas de hielo o toallas húmedas.
- Cubrir con sábanas húmedas frías.
Si el paciente pierde el conocimiento y no muestra signos de circulación, como respiración o movimiento, es esencial iniciar la reanimación cardiopulmonar. El Instituto Nacional de Salud Pública de México (INSP) define el golpe de calor como una elevación de la temperatura corporal por encima de 39.4°C, debido a condiciones ambientales extremas o actividad física vigorosa.
Para prevenir este peligroso padecimiento:
- Permanecer en lugares frescos y ventilados.
- Utilizar gorra, lentes de sol, sombrilla y protector solar.
- Lavarse las manos con frecuencia.
- Evitar el consumo de alimentos en la calle.
- Mantenerse hidratado.
- Evitar la exposición prolongada al sol.
- Usar ropa ligera y de colores claros.
Aunque cualquier persona puede sufrir un golpe de calor, los grupos más vulnerables incluyen a niños menores de seis años, adultos mayores de 65 años, personas con sobrepeso, deshidratadas, con problemas en las glándulas sudoríparas y enfermas del corazón. La prevención y la acción rápida son fundamentales para proteger la salud en épocas de altas temperaturas.